Sin previsibilidad agropecuaria
14/10/21- Las PASO funcionaron como una bandera de alerta roja para al Gobierno Nacional, pero, como si nunca hubieran ocurrido, las medidas que se siguieron tomando en materia económica no hacen más que agravar la situación de incertidumbre e inestabilidad y desalentar la producción, tanto para el presente como así mucho más para el futuro.
Particularmente las políticas agropecuarias no dejan satisfecho a nadie. El nuevo ministro, Julián Domínguez, prometió liberar las exportaciones de carne a China y luego en la letra chica apareció un nuevo CUPO y con fecha de vencimiento al 31 de diciembre. Señor Ministro, ninguna economía puede administrarse de a 70 días. Así, todos perdimos. Mientras que el precio en góndola de la carne NO cambia y sigue inaccesible para las clases bajas, las arcas públicas perdieron alrededor de 1.000 millones de dólares de exportaciones
Sumado a esto, las continuas amenazas de intervención al resto de las exportaciones agropecuarias demuestran que el Campo sigue siendo el enemigo número 1 del gobierno de Alberto Fernández. Cíclicamente vemos que, ante la nueva venta de la cosecha, el gobierno intenta intervenir a toda costa, limitando o cerrando un sector. Hoy es el maíz, sector dedicado a crear riqueza, empleo y divisas constantemente.
Nuestra postura es clara: para que un precio baje, hay que producir más (no poner más cepos) y para que los ciudadanos puedan comprar hay que atacar directamente a la inflación, no a los productores.Basta de medidas arbitrarias que desalienten la inversión, queremos un gobierno con reglas claras, con previsibilidad y con estabilidad.-