QUEDÓ SORDO A LOS 3 MESES: LO OPERARON Y HOY EMPEZÓ A ESCUCHAR DE NUEVO
15/8/12- Al nene, que ahora tiene casi un año y medio, le colocaron un implante coclear hace un mes. Hoy lo activaron y comenzó a percibir sonidos. Esto le permitirá recuperar la audición y aprender a hablar. La cirugía se hizo en el hospital provincial “Eva Perón”, en San Martín.
Un equipo de expertos del hospital provincial Eva Perón de San Martín activó con éxito esta mañana el implante coclear que le colocaron hace un mes a Alan Galarza, un nene de un año y medio que había quedado sordo de ambos oídos por una meningitis.
El implante, que devuelve la capacidad auditiva en algunos casos, tiene un costo de 25 mil dólares en el sector privado. En este caso fue gratuito para la familia Galarza y contó con financiamiento del Plan Nacional de Detección de la Hipoacusia.
Esta mañana, en el Instituto Oral Modelo de Florencio Varela, de donde es oriunda la familia de Alan, el médico que encabezó la cirugía, Daniel Pérez Gramajo, confirmó que todo estuviera cicatrizado y en condiciones para proceder al encendido y calibración del aparato.
Se le colocó una suerte de audífono conectado al implante. Éste, a su vez, estimuló al nervio auditivo. De pronto Alan se sobresaltó y abrió bien grandes los ojos negros: había percibido un sonido por primera vez desde que tiene registro. Durante toda la mañana estuvieron probando estímulos auditivos. El pequeño sonrió fascinado con la novedad.
Como se enfermó a los 3 meses de vida nunca pudo desarrollar el lenguaje. Ahora, que empezó a escuchar, se espera que también comience a balbucear y luego a hablar.
TRES DE CADA MIL
El ministro de Salud de la Provincia, Alejandro Collia, explicó que “alrededor de tres bebés de cada mil recién nacidos tienen hipoacusia y se calcula que, de esos tres, uno requerirá un implante coclear”.
Agregó que es importante que tanto los padres como los pediatras presten atención a los signos de la baja audición “porque en muchos casos la detección temprana aumenta las posibilidades de tratamiento y de que el chico llegue a la edad de ir a la escuela habiendo desarrollado el lenguaje”.
El pequeño Alan es el menor de cuatro hermanos. Después de la activación del implante “parece que baila, no para de moverse, de mirar para todos lados, está como loco”, contó hoy la mamá, Verónica Sacan, de 30 años.
Derivado del hospital provincial “Mi Pueblo” de Florencio Varela, llegó al Eva Perón de San Martín con un diagnóstico de hipoacusia neurosensorial profunda bilateral, irreversible. Fue la consecuencia de una meningitis a neumococo, una bacteria que puede dejar consecuencias devastadoras en los más chicos y que lo llevó a Alan a estar un mes internado.
Los médicos le dijeron a Verónica que podía quedar ciego y también sordo. Al cabo de cuatro semanas de internación le hicieron diferentes estudios. La visión no había sido afectada pero los oídos sí.
Con el diagnóstico definido, se resolvió una rápida derivación para la colocación del implante, intervención que se concretó el 10 de julio pasado y duró alrededor de seis horas. “Una de las complicaciones de este tipo de hipoacusia es que si no se opera rápidamente es probable que el niño no pueda desarrollar el habla y que se compliquen todos sus procesos del aprendizaje”, dijo Pérez Gramajo.
A diferencia de los audífonos, los implantes cocleares se colocan en el interior del oído y ofrece un mejor sonido, haciéndolo más claro y fuerte. La función es sortear las partes dañadas del oído y estimular directamente el nervio auditivo para que el afectado escuche.
CAUSAS Y TRATAMIENTO
Las causas de la hipoacusia son diversas, aunque la mayoría de las veces resulta congénita. Por otra parte, que la madre haya padecido rubéola durante el embarazo o la prematurez, también puede ser motivo de problemas auditivos.
El implante coclear no se limita a la operación. El tratamiento se inicia mucho antes de ese momento, con estudios y análisis del caso de los que participa un completo equipo interdisciplinario formado por audiólogos, psicólogos, especialistas del lenguaje, asistentes sociales y otorrinolaringólogos.
Cuanto más temprana es la detección de los problemas auditivos de los niños, mayores son las posibilidades de revertir sus consecuencias, como las fallas en la pronunciación, en el aprendizaje escolar y en el desarrollo del lenguaje.
Ayer el especialista que operó a Alan concurrió al ministerio de Salud provincial para reunirse con el viceministro, Sergio Alejandre, a quien lo puso al tanto de los logros: desde septiembre de 2011 a la fecha 19 chicos recibieron implantes cocleares y se espera que se coloquen otros 13 antes de que termine el año.
COMPORTAMIENTOS DE NIÑOS CON PROBLEMAS DE AUDICION:
De 0 a 3 meses
No se despierta con ruidos intensos.
No reacciona ante ruidos sorpresivos y fuertes.
De 3 a 6 meses
No busca con la mirada la voz de su madre.
No emite gritos o sonidos para llamar la atención.
De 6 a 9 meses
No responde cuando lo llaman por su nombre.
No gira ante los ruidos.
De 9 a 12 meses
No aprende a ejecutar órdenes sencillas (“chau”, “beso”, “upa”).
No emite sonidos que se le enseñan reiteradamente.
No manifiesta reconocer palabras familiares y sencillas.
De 12 a 18 meses
Se muestra interesado sólo por lo que ve.
No ejecuta órdenes sencillas.
No dice ninguna palabra.
De 18 a 24 meses.
No adquiere lenguaje.
Grita y/o señala cuando quiere algo.
No responde cuando lo llaman, aún gritándole.