Pedido de Difusión

Juventud Radical de Chacabuco

12/3/16- Hoy, tenemos la posiblidad der ser militantes del partido gobernante. No solo por el bien común del pueblo, sino para reconstruir el partido desde las bases. Porque el pueblo necesita de un radicalismo fuerte. Nunca militamos por nuestro bien. O sí, pero por nuestro bienestar moral, por las ganas de representar estos ideales que tanto le dieron al país. Desde el primer presidente, pasando por el voto universal y devolviendo la democracia que es nuestra bandera, entre tantas cosas.

Significa tanto la democracia, tanto, que en hechos ha sido demostrado. Allá por el ’89 Raúl Alfonsin, renunciaba a la presidencia para asegurar la paz. Porque llevamos la bandera Argentina un poco más arriba que la partidaria.
Cuántos quisieron y creyeron que el partido desaparecía a partir del nuevo milenio. Pero no. Seguimos militando «para construir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer la defensa común, promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad para nosotros, para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que deseen habitar el suelo argentino».
Ser Radical es creer en el ser humano, confiar en sus capacidades. La fuente inspiradora de sus actos, pero siendo conciente de sus alcances y limitaciones. Ser Radical es ser razonable, es creer en la fuerza de los argumentos y entender que las cosas no pasan por que si. Ser Radical es creer en la libertad de conciencia y expresión como inherente a la democracia, y a éste modelo político, por mucho, el más beneficioso. Ser Radical es creer y promover la participación.
Hoy militamos en nombre de una mística que llenaba estadios, que dejaba chica a la Bajada Vieja. Que nos mantenía noches enteras doblando boletas y panfletos, punteando padrones, o haciendo los preparativos en el comité para el día de la elección. Esa mística debe hacer posible un partido ganador que defienda los intereses del pueblo, del desposeído, que defienda la educación, la salud, el empleo y por sobre todas las cosas, la libertad y el derecho de nuestra gente.
Es hora de volver a creer en nuestro partido, levantarlo y dar muestra de que estamos y seguiremos a disposición del pueblo. Militando, porque es la única forma que conocemos y en la que confiamos. ¡Adelante Radicales!