Nota del Partido Justicialista de Chacabuco
25/3/25- A 49 años del golpe cívico-militar más siniestro de la historia argentina, reivindicamos la lucha de nuestros compañeros y compañeras detenidos-desaparecidos, así como el consenso social y político en defensa irrestricta de la democracia, la memoria, la verdad y la justicia. Esta bandera ha sido sostenida de manera permanente por las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, las organizaciones de derechos humanos, los movimientos populares y una política de Estado durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.
La última dictadura cívico-militar representó el mayor atentado contra la vida y la dignidad de los argentinos, con consecuencias impensadas hasta el día de hoy. El terrorismo de Estado dejó víctimas directas: fusilados, más de 30.000 compañeros perseguidos y desaparecidos, sobrevivientes torturados en centros clandestinos de detención, hijos apropiados —algunos recuperados y muchos aún buscados—, exiliados, censurados y un país sometido a un modelo económico de desguace del Estado, endeudamiento y desigualdad, cuyas consecuencias siguen vigentes en nuestro presente.
Este proceso, llevado a cabo por las Fuerzas Armadas de nuestro país, contó con la complicidad y el apoyo de los principales medios de comunicación privados, poderosos grupos económicos, el gobierno de los Estados Unidos y la pasividad de la comunidad internacional.
Hoy, nuevamente, emergen en nuestra patria discursos y prácticas que remiten a aquella época oscura que tanto daño nos hizo.
Por eso, seguimos construyendo memoria, buscando verdad y exigiendo justicia para los genocidas militares y sus cómplices civiles.
No olvidamos. No perdonamos. No nos reconciliamos.
Partido Justicialista de Chacabuco
