Flexibilización de la cuarentena: el estado abandonó a los trabajadores
En conferencia de prensa el intendente Aiola anunció la flexibilización de la cuarentena para comercios no esenciales, oficios y profesionales. Podrán trabajar de 8 a 14hs. El anuncio se realizó a pesar de los recientes casos de Covid 19 positivo en nuestra ciudad. A la fecha se registraban 104 personas en cuarentena, 8 sospechosos y 5 casos positivos.
La presión internacional por el levantamiento de la cuarentena no tiene ningún sustento científico ni sanitario, solo es fundamentada en lo económico y en que tanto el gobierno nacional, provincial y municipal ha dejado a los trabajadores a su suerte frente a la pandemia. La presión real viene del empresariado para retomar la actividad productiva. Con despidos, suspensiones, recortes en el pago de salarios (acordados por la UIA, CGT y el propio Fernández) Con este ataque en regla logrado doblarle la mano al gobierno. Contradictoriamente en todos los países dónde se levantó hubo rebrotes de contagios (Corea del Sur, Italia).
El problema es que el gobierno no garantiza la cuarentena:
La IFE se mostró totalmente insuficiente, va a tardar 2 meses en llegar a todos los inscriptos, y dejó a 4 millones de personas afuera. A nivel local son muchas las denuncias de la inacción de Desarrollo Social, los bolsones no llegan a todos los barrios, localidades ni los hornos de ladrillos. El municipio no pone un solo peso para esto y solo se vale de donaciones solidarias. El gobierno de Aiola no reparte gratuitamente elementos de higiene en los barrios. No otorga subsidios de $5000 como si lo hizo en la campaña electoral.
En este contexto los trabajadores locales, comerciantes, autónomos e informales se quedaron sin opciones. Al no ser alcanzados por ninguna medida del gobierno, piden trabajar para comer. La respuesta no debería ser dejarlos a su suerte, reabrir la economía sin ninguna planificación, ni seguridad, aumentando la circulación de personas, sino brindarles un seguro por parte del estado.
Desde el Partido Obrero consideramos que no es momento de flexibilizar, ni a nivel local con el ingreso del virus, ni a nivel nacional donde curva de contagios comienza a ascender y estamos ingresando en el invierno y mientras comienzan a verse signos de alarma en el sistema de salud a nivel nacional.
La salida va por el pago de un seguro de $30.000 por mes a cada laburante en negro, autónomo, pequeño comerciante y desocupado mientras dure la pandemia. La plata tiene que salir del no pago de la deuda externa, del cobro de impuestos a los que más tienen: grandes fortunas, agroindustria, bancos, especuladores inmobiliarios. Hay que repartir gratuitamente elementos de higiene en los barrios más necesitados. El municipio tiene que poner plata para la compra de bolsones de mercadería y hacer la logística con sus vehículos o contratar fleteros. Debe destinar partidas para brindarle a los trabajadores del hospital todos los elementos necesarios para cuidarse y testeos masivos para todos ellos. Apoyar a todos los grupos solidarios independientes que asisten a quienes lo necesitan, vamos por el control popular de la cuarentena. Que no nos pongan contra la espada y la pared, deben respetar la vida y la salud de los trabajadores con medidas reales para garantizar la cuarentena.
Con hambre no hay cuarentena.
Partido Obrero Chacabuco