Aiola cobra un escandaloso e inmoral sueldo y beneficios que hacen que no gaste ni en nafta: Carlos Costa
12/8/20- El ex asesor Letrado del Municipio, Carlos Costa, manifestó su descontento con el Intendente Municipal, Víctor Aiola, por los haberes que perciben los empleados municipales.
Textual lo escrito por Carlos Costa:
El señor Intendente dice que está bien pedir , pero hay que darse una baño de realidad y que hay que estar agradecido por cobrar todos los meses.
Piden porque los magros haberes que perciben no les alcanza para satisfacer las necesidades básicas de sus familia.
Desde luego, no es la situación de Aiola, pues cobra un escandaloso e inmoral sueldo, más todos los beneficios adicionales que se procura para sí mismo, que implica que no gaste ni en nafta.
La gente, desde luego lo acompaña, descalificando la labor diaria de los trabajadores municipales.
Trabajadores municipales de la salud que ponen todo su esfuerzo, vocación y se exponen en resguardo de la salud de todos, los trabajadores que salen diariamente a recolectar los residuos y a limpiar la ciudad, trabajadores municipales de todas las áreas del municipio que trabajan arduamente para atender diferentes situaciones y aquellos que realizan el trabajo administrativo que permite que se pueda llevar adelante lo anterior .
Aiola , es usted quien debe darse un baño de realidad bajándose el inmoral haber que percibe, solicitando a su bloque de concejales que hagan lo propio y presenten y aprueben una Ordenada bajándose sus suculentas dietas ; dietas, también, inmorales y desproporcionadas a la prácticamente inexistente contraprestación.
Es Aiola, quien debió haberse dado un baño de austeridad y transparencia; y de este modo cuidar el dinero de todos y hacer honor a su cargo .
Pero prefirió derrochar el erario público, nombrando a más de trescientos nuevos agentes municipales y a una planta exorbitante de funcionarios innecesaria.
Un baño de honestidad para así manejar con absoluta transparencia el dinero de todos. Transparencia que faltó.
Aiola es absolutamente responsable de la crítica situación económica que atraviesa el municipio y lo sabe , lo sabe la sociedad.
Está sociedad que olvidó que fue él mismo quien se autodeclaró la emergencia económica, cuando arengaba en su campaña reelecionista que estaba transitando el camino a la ciudad modelo, mientras procuró desesperadamente con comportamiento clientelar conservar el poder.