COBOS, EL PRIMERO
Su propuesta descentralizadora genera esperanzas
Por Orlando Costa*
17/11/09- Muchos compatriotas rechazan la forma de hacer política del oficialismo K: la confusión entre Estado, Gobierno y Partido Gobernante; el uso y abuso del poder; la corrupción; la intolerancia; el discurso único; la confrontación permanente; y por supuesto la ineficiencia de las políticas públicas para resolver tantos problemas.
Comienza a discutirse una reforma con la que ojalá logremos buenos resultados en cuanto al funcionamiento de los partidos, el sistema electoral y la calidad de la política.
Sería bueno agregar otra cuestión, para posibilitar mejores gobiernos y mayor eficacia del Estado: la descentralización de recursos y decisiones.
En este sentido, destaco una propuesta del Ing. Julio Cobos publicada días atrás. Un gran acuerdo de coordinación fiscal con los Gobernadores y el Congreso orientado a transferir 20.000 millones destinados a obra pública, salud, educación y vivienda, entre otros fondos que hoy controla el gobierno central, al manejo de las Provincias y los Municipios.
Es el primer presidenciable que lo plantea, en largo tiempo, y ya lo realizó en Mendoza con el Fondo de Infraestructura Municipal.
Considero que es un tema muy importante. Las consecuencias de la concentración económica y decisional que tenemos en la Argentina son nefastas.
En España el 12 % del gasto público total se ejecuta en los niveles locales de gobierno, en Alemania el 30 %, en los países nórdicos más, por dar algunos ejemplos. En nuestro país es menos del 8%.
Descentralizar significa transferir poder, dinero y facultades, para decidir y hacer en los niveles subnacionales (provincias y municipios). Así se puede acercar la función pública a los ciudadanos, para que puedan controlar a los gobiernos y la utilización de los fondos públicos, para participar en la planificación de obras que mejore n sus condiciones de vida, para promover el desarrollo en los territorios aprovechando sus recursos endógenos y las oportunidades del contexto.
Esto mejoraría los niveles de representación y confianza, y como consecuencia la política.
Quizás faltarían capacidades en algunos municipios para manejar situaciones técnicamente complejas, pero eso es parte del desafío. Cambiar la cultura dependiente que nos lleva a pensar que todo, lo bueno y lo malo, debe venir «de arriba»; y mejorar las competencias ciudadanas en los territorios para asumir mayores responsabilidades y construir porvenir donde uno vive y trabaja.
Los países que progresan tienen este ingrediente en sus políticas públicas. Por eso, el planteo de Cobos alimenta la esperanza de lograr los cambios que necesitamos.
*Senador electo por la UCR en la Provincia de Buenos Aires