MASSA AMPLIÓ SU VENTAJA SOBRE INSAURRALDE A 12 PUNTOS
Se acerca al 40 % de intención de voto en la Provincia. El candidato de Cristina obtiene algo más del 27%. Stolbizer sigue tercera y se desploma De Narváez.
8/9/13- Cristina moderó el tono de sus discursos, borró de los primeros planos a los funcionarios más polémicos, mejoró Ganancias, reconoció o dejó reconocer que la inflación y la inseguridad no son parte de un país virtual. Los candidatos K irrumpieron en la pantalla prohibida. Y Daniel Scioli, con el silencio cómplice de los cristinistas de paladar negro, designó a un ministro de Seguridad con credenciales de defensor de la mano dura.
Pero nada parece alcanzar.
Eso refleja la última encuesta en la provincia de Buenos Aires: Sergio Massa, el verdugo del kirchnerismo en la primarias, ya estira la diferencia al doble de la que le sacó a Martín Insaurralde en el duelo de agosto.
Cuando restan sólo siete semanas para la votación, el intendente de Tigre se encamina a hacer una elección histórica en el principal distrito del país, donde se concentra el 38 por ciento del padrón nacional, y desde el que Néstor Kirchner edificó su poder a partir de 2003. Aun con casi un diez por ciento de votantes indecisos o que frente a los encuestadores prefirió no divulgar su elección, Massa araña los 40 puntos y el intendente de Lomas de Zamora retrocede a poco más del 27. En las primarias, Massa había conquistado al 35,05% del padrón e Insaurralde al 29,65%.
Los números pertenecen a la encuestadora Management & Fit, que entrevistó en persona y por teléfono a 1600 bonaerenses en zonas representativas del interior de la Provincia y del GBA en pleno giro estratégico de la Casa rosada, entre el 26 de agosto y el 5 de este mes. Es la misma consultora que acertó el resultado de las PASO y que también registró –y registra en este sondeo– un sombrío panorama para K en Capital Federal.
Massa también supera a Insaurralde en el GBA –le saca 5,4 puntos de ventaja– y lleva a más de 20 puntos la diferencia en el interior de la Provincia.
El crecimiento del conductor del Frente Renovador se basa en el salto que pegaron los votantes de Francisco de Narváez. La candidatura del peronista anti-K se desploma y un 20 por ciento de quienes reconocieron haberlo elegido en las primarias ahora afirman que cambiarán por la boleta del Frente Renovador. Para evitar más desgaste, De Narváez también cambia su estrategia: ya no apelará al Ella o Vos. En sus carteles comienza a verse “Estamos con vos”.
La caída del diputado asomaba previsible, según la mayoría de los analistas, porque muchos votantes no kirchneristas, los más rabiosos, observan un escenario similar al de un balotaje y apelarán a lo que consideran la opción más segura, al llamado “voto útil”.
En la cabeza de muchos la contienda ya pasó: es decir, octubre no será mas que un paso para ratificar lo que ocurrió en agosto. Es una de las dificultades que enfrenta el kirchnerismo.
Lo que sorprende en este trabajo es que un 6,7% de quienes se inclinaron por el Frente para la Victoria también afirmen que van a votar por el tigrense. Insaurralde, por sì mismo, sigue siendo un candidato sin poder de seducción y sólo conserva el voto duro del oficialismo.
Margarita Stolbizer, en tándem con Ricardo Alfonsín, continúa sin poder capturar el descontento social de modo masivo pero, al menos, puede exhibir la fidelidad de sus votantes. La líder del GEN, aliada de Hermes Binner (el político con mejor imagen del país, por encima de Massa y Scioli) se afianza en el tercer lugar y obtiene el 12,1%, un punto más que un mes atrás. Cuarto queda el candidato del Frente de Izquierda, Néstor Pitrola, quien pelea voto a voto para poder llegar al Congreso.
Massa se da el gusto de aparecer poco y nada en la TV y se aferra a la estrategia que lo catapultó al éxito: sólo confronta cuando se ve obligado, enfría todo lo que puede y prefiere que se lo vea inaugurando obras, por más modestas que sean, en lugar de mostrarse en grandes actos. Cuando alguien pisa su despacho y se atreve a deslizar alguna crítica sobre la campaña o a plantear en tono de broma que está haciendo la plancha para que el tiempo pase, Massa suele llamar a uno de sus colaboradores para que le alcancen los números y dice: “Mirá lo que dicen las encuestas”. Está tan confiado que, a veces, para bajar la expectativa, juega a tirar los números para abajo.
Fuente y foto: clarin.com.ar