LA GANADERIA ARGENTINA RESGUARDA LA FABRICA DE TERNEROS Y SE POSICIONA COMO UNA ACTIVIDAD RENTABLE

14/7/11- La disminución en la participación de hembras en faena, la recuperación del precio del ternero, el aumento de novillos pesados en faena y el lanzamiento de líneas de créditos a tasa subsidiadas por parte del Ministerio de Agricultura, aparecen como factores importantes que permiten asegurar que la ganadería argentina está comenzado su proceso de recuperación, alentando a los productores a definir inversiones y planificar su futuro.

Alejandro Lotti, subsecretario de Ganadería, representante del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación en la 125° Exposición Rural que hoy abrió sus puertas y el Coordinador del Programa de Carnes del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), Daniel Rearte, coinciden en que la actividad ganadera en nuestro país presenta las mejores condiciones para su recuperación.
“La ganadería presenta una situación marcadamente diferente a los años anteriores. En este momento la ganadería presenta las mejores condiciones para su recuperación”, aseguró Alejandro Lotti esta tarde desde el stand que posee el Ministerio de Agricultura en la Exposición Rural que se desarrolla en predio que posee la Sociedad Rural Argentina en el barrio de Palermo.
La retención de vientres, un factor clave
La participación en faena es el porcentaje representativo del género (hembra o macho) sobre el total de animales faenados.
La caía de participación de hembras en faena marca el cierre del ciclo de liquidación de vientres y es quizás el factor clave para que se produzca el aumento en la producción.
Los productores han vuelto a ver rentable el negocio y optan por conservar las fábricas de terneros, por lo que disminuyeron la matanza de vacas en aproximadamente un 6% en promedio entre 2009 y 2010.
Además, durante los cincos primeros meses del 2011, esta tendencia muestra afianzarse al marcar un promedio de participación en torno al 38%.
En el siguiente cuadro se muestra la evolución de la participación de las hembras en las faenas de los primeros cuatro meses de los años 2009, 2010 y 2011. Asimismo, en la última fila se esbozan los promedios anuales (en 2011 se toma en cuenta hasta abril).

En este contexto, Rearte explicó que “hoy vemos que los productores están reteniendo las vacas, no las faenan, porque el negocio ganadero es producir terneros. Es un proceso lento. No hay que perder de vista que en los últimos años se redujeron las cabezas de hembras a 20 millones”.
Asimismo, Rearte sostuvo que “estamos intensificando la producción de terneros para tener más carne con las actuales 20 millones de hembras con que cuenta la ganadería y en ese camino se orientan los productores”.
Como contrapartida, del escenario anteriormente citado, ha crecido en paralelo la faena de novillos pesados, tal como se muestra en el siguiente cuadro:

Este factor es una consecuencia inmediata de la caída de la partición de hembras en faena, que se observa claramente en el siguiente cuadro comparativo.

La recuperación del precio del ternero y el retorno a la actividad
“Los altos precios vinieron para quedarse”, sostuvo Rearte. Y agregó: “Más relevante que los precios en sí es la relación que existe entre lo que se paga por el novillo y el valor del ternero, favorable para este último”.
La importancia que representa el aumento en el precio del ternero es que alienta a los productores a producir más terneros y de esta manera se retienen más vientres para lograr ese aumento de producción.
En el presente, los precios del mercado interno son tan buenos como los precios internacionales, por lo tanto la actividad vuelve a ser rentable y los productores de a poco están apostando al futuro del sector.
La ganadería había sido desplazada de algunas zonas de la pampa húmeda, dónde se había adoptado la actividad de la llamada “agricultura marginal”, mientras que la ganadería se desplazó hacia el norte del país (cuadro).

Desde la tradicional Exposición Rural, Lotti, explicó el concepto de agricultura marginal de la siguiente forma: “ante los bajos niveles de precios de hacienda los productores ganaderos se convertían en agricultores marginales, esto significa producir soja dónde el rendimiento de la soja es muy bajo y no supera los 12 o 14 quintales con un enorme deterioro ambiental y que son lugares que califican exclusivamente para ganadería”.
Con la recuperación de los precios del ternero, la actividad ganadera recuperó terreno ante la agricultura marginal y se puede observar una gran cantidad de productores que están retomando la producción vacuna.
En este sentido Rearte manifestó que “si bien en el país hay una nueva geografía productiva, los productores encontrarán un panorama de intensificación científico-tecnológica y en ese sentido podrán lograr hacer de la ganadería una actividad rentable y sustentable.
Política de financiamiento para el sector por parte del Estado

Plan Federal de Ganados y Carnes: créditos para una mejor productividad ganadera

El Plan Federal de Ganados y Carnes tiene como estructura la implementación de la nueva línea de créditos para la ganadería destinado a incrementar la producción a través de inversión de infraestructura, compra de vientres y de forrajes.
La particularidad que tiene este Plan es fijar un marco de las mejores prácticas para aumentar la productividad y la eficiencia: esto es todo lo que haga a la mejora de la alimentación, de la sanidad, al mejoramiento genético, a la mejora de infraestructura productiva – ganadera, tanto de bovinos, ovinos, porcinos y aves.
Esta línea de créditos estará destinada al sector de la ganadería vacuna, porcina y aviar, la tasa de interés será del 14 por ciento y contará con un subsidio de 6 puntos otorgado por el Ministerio de Agricultura, con lo cual quedará una tasa final de alrededor de entre el 8 y 9 por ciento anual. Mientras que la ejecución de los créditos quedará a cargo del Banco Nación, el Banco Provincia y el Banco de La Pampa.
El objetivo del Plan Federal de Ganado y Carne es llevar el rodeo a 55 millones de cabezas en 5 años.
En declaraciones efectuadas esta tarde, sobre esta política Lotti destacó que “se trata de un pedido histórico del sector que hemos logrado con mucho esfuerzo”
“El sector ganadero estaría en condiciones de incrementar su producción en un 70 por ciento dentro de los próximos diez años”, destacó Rearte
La ganadería, después de mucho tiempo, está en condiciones de comenzar a pensar en un camino ascendente, en una recuperación de la producción acentuada en la intensificación de la misma, situación que años atrás era inimaginable.